Hoy, 14 de Julio de 2009, un año después de haberle conocido, hoy, no me preguntes por qué, estoy totalmente sanado. Hoy sin saber de qué manera, ha desparecido el rencor. Hoy la cicatriz se ha borrado del todo. Hoy la parte de mi alma que estaba herida, que ardía con la desagradable sensación de sentir ira, vuelve a estar en calma, en su estado natural. Contempla lo que le rodea viéndolo fluir, igual que tras un tiempo de Zen. Y escribo esto mientras escucho The Killers y me siento mejor persona. Y me alegro por ello. Y ahora sí estoy preparado. Etiquetas: Alma |